Fotos: instagram.com/49ers

Hay un dicho en el football americano que dice: "Las ofensivas llenan estadios, las defensivas ganan partidos, y los pateadores campeonatos". Eso sucedió en el partido de Lunes por la noche de la NFL entre los 49ers y los Falcons. El partido se encontraba muy parejo. Los 49ers dejaron acercar a los Falcons a solo tres puntos (27-24) cuando muy cerca de la zona de gol, Navorro Bowman interceptó un pase desviado y lo regresó 89 yardas para sellar la victoria de los 49ers en su despedida del estadio Candlestick de temporada regular. Fue una jugada que le hizo recordar a la afición de San Francisco, que este equipo se ha construído de grandes jugadas en momentos difíciles, desde aquella atrapada de Dwight Clark conocida como "The Catch". El próximo año los 49ers estarán jugando en el nuevo estadio en Santa Clara llamado Levi's Stadium.

La afición de San Francisco sigue soñando con un Superbowl, y su defensiva está para hacer jugadas grandes en momentos difíciles. Esperemos que sea la mística de esta nueva generación de jugadores y que sus líderes defensivos los lleven a completar el #questforsix

Hablando de defensivas, los Carolina Panthers lucen imponentes, pero el equipo que sorprendió por su defensiva en el fin de semana, fueron los Arizona Cardinals. Karlos Dansby tuvo un juego memorable, y ayudó a propinarle su primer derrota en casa a Russell Wilson y los Seattle Seahawks.

Hay mucho espectáculo ofensivo en la conferencia americana, y mucho poder defensivo en la conferencia nacional. Tendremos que esperar a que empiecen los playoffs para ver qué equipo demuestra que es contendiente al título de la NFL.

 Como jugador defensivo, siempre piensa uno en hacer la captura en el momento adecuado, interceptar un pase cuando la ofensiva contraria está a punto de anotar, o provocar un safety para demostrar que las defensivas son el alma de un equipo.