VISTIENDO UN SUEÑO

 

Pareciera que fue ayer cuando un servidor empezó a aprender el arte del torear, en el ruedo de la Plaza de Toros “La Luz”, mismo donde conocí a jóvenes con mi mismo objetivo, “querer ser toreros”, o por lo menos empaparnos más de cerca de lo que es “el arte de Cuchares”; Pero es hoy cuando uno de aquellos chavales que estábamos en esa camada empieza a brindar frutos, su nombre es Joel Arturo Delgado “El Panita”, quien empieza a labrar un camino en esta difícil profesión, pero que va creciendo poco a poco, gracias al apoyo del matador leonés Ismael Rodríguez y de la Academia Taurina de Aguascalientes.

 

La semana pasada he podido ser testigo de la entrega de un traje de luces que el Centro Taurino de la Ciudad de León, entregó al “Panita” para ir “vistiendo un sueño”, ya que hoy por hoy, es la promesa que tiene esta Ciudad, el cual necesita del apoyo de la afición para que salga adelante.

 

Mi enhorabuena al Centro Taurino de León y a su Presidente (Manolo Rubio), por dar este gran esfuerzo por ver crecer y ayudar a vestir un sueño que más temprano que tarde, esperemos que de frutos positivos para esta Fiesta Brava, que tanto lo necesita.

 

Y tocando el tema de la misma Fiesta, hoy recibe otro fuerte golpe la misma, ya que Acapulco dejará de dar toros, por la nueva prohibición a los festejos taurinos, situación que va mermando todo el buen trabajo que se venia dando, ya que en el coso de la “Playa Caletilla”, venía sirviendo como incubadora de  grandes novilleros, ya que siempre se estrenaban los jóvenes en este coso, que lastima que por alguna “moda”, se queden sin empleo y sin Fiesta en el este bello puerto de Acapulco, que lo que hoy en día más requiere es de esto, de eventos que ayuden a fomentar el turismo.

 

Para cerrar faena, espero que hoy los jóvenes novilleros salgan a triunfar a por todas, ya que los necesitamos para que la Fiesta siga viviendo, ya que como todo en esta vida es un ciclo, los toreros ya antiguos van dejando los avíos y los nuevos valores deben de apretar para refrescar la misma, es entonces que estamos seguros que hoy por hoy en México tenemos una buena baraja, solo hay que apoyar y tirar pa´ delante.

 

 

“Las prisas para los delincuentes y los malos toreros”

Juncal